25/12/09

El decir de hoy


Seguiremos con los análisis de dos modos de decir, más allá de lo meramente fáctico, discerniendo entre la mera 'casualidad' de la palabra fonéticamente anclada al lenguaje, en un decir 'de hoy', 'moderno', y, próximamente, el 'necesario' arraigo de la palabra como escritura de la cosa misma, en un decir 'de ayer', para el mundo mesopotámico y su temible escritura cuneiforme.




"Se sabe de antiguo que el nombre [para los mesopotámicos] no era, en absoluto, lo que es para nosotros, un epifenómeno, un puro accidente extrínseco a la cosa, un flatus vocis, simple conjunción arbitraria de una relación de significación con un agrupamiento de fonemas. Muy al contrario, aquellas gentes estaban persuadidas de que el nombre tiene su fuente, no en el que nombra, sino en la cosa nombrada, de la que es una emanación inseparable: como la sombra, el calco, la traducción de su naturaleza.

Tanto que a sus ojos, "recibir un nombre" y existir (evidentemente: según sus cualidades y la presentación que denota ese nombre), era una misma cosa. El primer dístico de la Epopeya de la Creación (I, 1-2):

Cuando, allá arriba
el Cielo no estaba (todavía) nombrado

(Y) aquí abajo, la Tierra
no había sido llamada con un nombre

[...]

Para nosotros, la escritura, totalmente alfabetizada, es decir, basada en el análisis fonético de la palabra que lleva hasta sus elementos irreductibles, tiene como función primera la de fijar materialmente lo que, como palabra pronunciable, no tiene más que una existencia transitoria y, como concepto significado, más que una realidad intramental e incorporal. La escritura nos sirve, pues, ante todo, para conferir una existencia objetiva y duradera a la palabra, la cual traduce nuestro pensamiento, nuestra visión de las cosas. Desaparece ante la palabra y lo que representa la palabra: no es nada sin ella y no le añade nada, si no es la materialidad y la durabilidad."





Escritura y dialéctica, o progreso del conocimiento; Mésopotamie. L'écriture, la raison et les dieux, Jean Bottéro, 1987.

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